El borrador interno de una disposición con fecha de 11 de diciembre ha puesto en alerta a los funcionarios y personal laboral de todas las administraciones. El documento prevé el aumento de la jornada laboral de las 37,5 horas actuales a 40, en algunos casos, y a 45 en otros. El hecho de que el Ministerio de Hacienda haya salido a desmentir la autoría del texto ha generado aún más dudas entre los trabajadores de las administraciones públicas, dada la trayectoria del Gobierno en este sentido.
Fuente: diarioprogresista.es

La subida del IRPF, la del IVA, la de las matrículas universitarias, la bajada de las pensiones, el copago sanitario, el asalto a la radio televisión pública… Hay todo un catálogo de medidas aprobadas por el Ejecutivo del Partido Popular que fueron previamente desmentidas con la misma solemnidad con la que hoy, desde el Ministerio de Hacienda, se ha negado el presunto borrador.
El documento, que tiene rango de Resolución y prevé su publicación en el BOE “antes del 02/01/2013”, tendría su origen en la Secretaría de Estado de Hacienda y Administraciones Públicas. En él se hace constar que es de aplicación básica para “todas las Administraciones Públicas, regionales y locales”, y se justifica su adopción en aras de lograr una mejora “en la atención prestada al ciudadano, en cuanto se promueve la permanencia ininterrumpida en el puesto de trabajo durante el tiempo de mayor actividad, tanto interna como de afluencia del ciudadano a las oficinas públicas”. También se afirma que “supondrá una mejor utilización de los recursos públicos (…) en cuanto a los edificios e instalaciones públicas, ya que la jornada de trabajo se fija con carácter general, hasta las veinte horas”.
En el artículo 2 de la presunta Resolución se establece que “la jornada laboral ordinaria se prestará en régimen de jornada semanal de 40 horas”, frente las 37 horas y media actuales. También que los funcionarios que perciban el conocido como complemento específico de productividad (el de especial dedicación ene caso de los laborales) “deberán prestar una jornada semanal de 45 horas. Es decir, que de ser cierto lo contenido en el borrador, habría empleados públicos que verían ampliada su jornada semanal hasta en siete horas y media.
Respecto del cumplimiento de horarios de trabajo, el borrador establece que “será obligatoria la presencia del empleado en el puesto de trabajo de 8 a 17 horas” en jornadas que podrán dar comienzo desde las 7 de la mañana y que finalizarán, con carácter general y en horario continuado, hasta las 20.00 horas.
Tras conocerse la existencia de este borrador presuntamente elaborado por Hacienda para su entrada en vigor el primer día laborable de 2013, tanto el Ministerio como el sindicato CSIF -el único que no secundó la Huelga General del pasado 14 de Noviembre- han tratado de desmentir que se trate de un documento oficial elaborado por el Gobierno, y han atribuido su filtración a una “intención de enturbiar las relaciones entre los empleados públicos y la Administración General del Estado”.
No es la primera vez que el Gobierno atribuye oscuras intenciones a informaciones que anunciaban medidas negadas y que luego fueron aprobadas. Algunos funcionarios que desconfían, con motivo, de las intenciones del Partido Popular, han apostado incluso sobre la fecha en que el borrador apócrifo podría convertirse en realidad. Sí, la favorita en las quinielas es el 28 de Diciembre, día de los Santos Inocentes.